En KNA Pickups, se dedican a ofrecer a los músicos de instrumentos acústicos medios un sonido y aspecto naturales para amplificar sus instrumentos. Su misión une las técnicas tradicionales de los artesanos del Viejo Mundo con la innovación de los músicos contemporáneos a quienes sirven. Cada una de sus pastillas es elaborada a mano en Europa utilizando materiales de alta calidad y maderas tonales típicamente utilizadas en la fabricación de los propios instrumentos.
Dentro de su amplia gama de soluciones de pastillas, ofrecen diversos diseños para asegurar que los músicos obtengan el mejor sonido adaptado a sus necesidades. Sus pastillas piezoeléctricas, magnéticas, pasivas y activas ofrecen una reproducción de sonido natural diseñada específicamente para cubrir el rango tonal y dinámico de cada instrumento. Cuentan con pastillas universales que se ajustan a casi cualquier instrumento con una superficie plana donde pueda colocarse el transductor, así como modelos específicos para guitarras con cuerdas de nailon y acero, ukeleles, banjos, bouzoukis, violines, violas, violonchelos y contrabajos. Cada uno está diseñado para ofrecer el sonido más auténtico posible, con una instalación sencilla que requiere mínimas o ninguna modificación en el instrumento.
LA HISTORIA
La historia de KNA tiene sus raíces en Vladimir Hranov, quien ideó y construyó un prototipo de pastilla montada en puente para guitarras con cuerdas de nailon.
Desde su infancia, Hranov demostró un interés por la radio y desarrolló habilidades para construir sus propios dispositivos, además de coches y aviones a control remoto. En los años 1960, comenzó a fabricar y vender pastillas de guitarra, y posteriormente amplió sus conocimientos al trabajar en la fábrica de guitarras Puldin, donde aprendió sobre la fabricación de pastillas magnéticas y fue promovido para liderar la división de guitarra eléctrica.
Vladimir Hranov en MUSIKMESSE Frankfurt en los años 90
Pastillas fabricadas por Vladimir Hranov para la empresa alemana GEWA en los años 90
Después de la disolución de la popular Compañía Puldin dirigida por el estado, Hranov continuó desarrollando sus ideas originales, incluyendo una serie de pastillas piezoeléctricas pasivas. En 2005, compartió sus ideas con Nikolay Iliev, distribuidor de instrumentos musicales Kremona en Norteamérica.
Las primeras pastillas se introdujeron en los Estados Unidos con mejoras en diseños y empaques. La línea de productos se expandió para satisfacer las necesidades de músicos de ukelele, violinistas, violonchelistas y bajistas.
Pastilla de guitarra acústica Vlado Hranov
Pastilla para violín/viola Vlado Hranov
En 2015, Iliev adquirió la empresa de pastillas y estableció una nueva instalación de producción en Plovdiv, la ciudad natal de Hranov. Hasta su fallecimiento en 2021, Vladimir Hranov siguió participando activamente en KNA como asesor y desarrollador senior.
Lijado a mano en el taller.
Barnizado a mano en el taller
La filosofía de KNA es proporcionar a los músicos la capacidad de amplificar sus instrumentos con mínimas o ninguna modificación. Sus pastillas, elaboradas a mano con la mejor electrónica disponible y revestidas con madera tonal de alta calidad, se distinguen por su ajuste, acabado y respuesta sonora superiores.
La empresa invita a los músicos a formar parte de su historia y a disfrutar de las innovaciones creadas por Vladimir Hranov y su equipo.